Según arte, se hacen fórmulas magistrales y preparados oficinales. Son la esencia de la farmacia: medicamentos personalizados, hechos a medida, para los pacientes. Cuando no se encuentra una solución entre las especialidades comercializadas, el médico puede prescribir una fórmula que haremos en la farmacia y que se adapte mejor a la enfermedad a tratar.

Nuestro laboratorio acreditado podrá cumplimentar con la prescripción médica, elaborando la fórmula que se indique.
Resulta una buena opción cuando no están disponibles en el mercado determinados medicamentos, se han dejado de comercializar o bien, cuando los demás no cumplen las expectativas.